Córdoba es una ciudad con una rica historia, una impresionante arquitectura y una cultura vibrante. Pero también es un destino gastronómico de primer orden, donde se puede degustar una cocina tradicional, variada y sabrosa, basada en los productos de la tierra y el aceite de oliva virgen extra. Si eres un amante de la buena mesa y quieres conocer los encantos de esta ciudad andaluza, te contamos cuáles son las mejores épocas para visitar Córdoba y disfrutar de su gastronomía.
Primavera: la explosión de color y sabor
La primavera es una de las estaciones más bonitas para visitar Córdoba, ya que la ciudad se llena de flores, aromas y color. Es el momento de admirar los famosos patios cordobeses, que se engalanan con macetas y plantas para participar en el concurso que se celebra cada año en mayo. Los patios son un símbolo de la identidad cordobesa y un ejemplo de convivencia entre las diferentes culturas que han pasado por la ciudad.
La primavera también es la época de las fiestas populares, como la Semana Santa, las Cruces, los Patios, la Feria de Nuestra Señora de la Salud o la Noche Blanca del Flamenco. Estas celebraciones son una oportunidad para disfrutar del ambiente festivo, del arte y de la música de Córdoba, pero también de su gastronomía. Algunos platos típicos que se pueden degustar en primavera son:
El salmorejo
Una crema fría elaborada con tomate, pan, aceite de oliva, ajo y vinagre, que se suele acompañar con huevo duro y jamón ibérico. Es un plato refrescante, nutritivo y delicioso, ideal para combatir el calor.
Las torrijas
Un dulce típico de Semana Santa, que consiste en rebanadas de pan empapadas en leche o vino, rebozadas en huevo y fritas en aceite. Se pueden espolvorear con azúcar o miel, o bañar en almíbar o chocolate. Son un bocado irresistible para los golosos.
El rabo de toro
Un guiso tradicional que se prepara con la cola del toro que se trocea y se cocina a fuego lento con verduras, vino tinto y especias. Es un plato contundente, sabroso y tierno, que se suele servir con patatas fritas o puré.
Los caracoles
Un aperitivo muy popular en Córdoba, que se cuecen con agua, sal y hierbabuena, y se sirven en su propia concha con un palillo. Se pueden tomar solos o con salsa picante, que se elabora con tomate, cebolla, ajo, pimentón y guindilla. Son un plato ligero, crujiente y aromático, perfecto a cualquier hora.
Verano: el frescor del agua y el gazpacho
El verano es una estación calurosa en Córdoba, pero también tiene su encanto. Es el momento de buscar el frescor del agua, ya sea en las fuentes, los baños árabes o las piscinas. También es el momento de pasear por las calles iluminadas por la luna, de asistir a conciertos al aire libre o de visitar los monumentos sin aglomeraciones.
El verano también es la estación del gazpacho, una sopa fría similar al salmorejo, pero más líquida y con más ingredientes. El gazpacho se elabora con tomate, pepino, pimiento, cebolla, ajo, pan, aceite de oliva, vinagre y agua. Se puede tomar solo o con tropezones de los mismos ingredientes picados. Es un plato refrescante, hidratante y saludable, perfecto para el verano.
Otros platos que se pueden degustar en verano son:
El ajoblanco
Otra sopa fría, de origen árabe, que se elabora con almendras, ajo, pan, aceite de oliva, vinagre y agua. Se suele acompañar con uvas o melón, que le dan un toque dulce y contrastan con el sabor del ajo.
La ensaladilla
Una ensalada fría que se prepara con patatas cocidas, zanahorias, guisantes, atún, huevo duro y mayonesa. Es un plato sencillo, pero muy apetecible y completo.
El flamenquín
Un rollo de lomo de cerdo relleno de jamón serrano y queso, empanado y frito. Es una de las tapas más populares de Córdoba, que se suele servir con salsa casera y patatas fritas.
Si quieres probar estos platos y muchos más, te recomendamos que visites El Caballo Rojo, un restaurante con una terraza acogedora y sombreada, donde podrás disfrutar de una comida o una cena al fresco. En El Caballo Rojo podrás degustar una cocina cordobesa de calidad, con platos tradicionales e innovadores, elaborados con materias primas de primera calidad y aceite de oliva virgen extra.
Otoño: la temporada de las setas y los dulces
El otoño es una estación ideal para visitar Córdoba, ya que el clima es más suave y los colores del paisaje son más intensos. Es el momento de hacer excursiones por la naturaleza, de visitar los pueblos blancos o de descubrir el patrimonio histórico y artístico de la ciudad.
El otoño también es la temporada de las setas, un producto muy apreciado en la cocina cordobesa. Las setas se pueden encontrar en los bosques y montes de la provincia, o en los mercados y tiendas especializadas. Se pueden preparar de muchas formas: salteadas, al ajillo, en revuelto, en croquetas, en salsa… Algunas variedades típicas son el boletus, el níscalo, la seta de cardo o el champiñón.
Otros platos que se pueden degustar en otoño son:
El potaje de garbanzos
Un plato de cuchara que se elabora con garbanzos, espinacas, bacalao y huevo duro. Es un plato nutritivo, reconfortante y sabroso, que se suele tomar los viernes de Cuaresma.
El bacalao confitado
Un plato delicado que se prepara con lomos de bacalao desalado, que se confitan a baja temperatura en aceite de oliva con ajo y laurel. Se suele acompañar con una crema de ajo negro y espinacas salteadas.
Los pestiños
Un dulce típico de las fiestas de Semana Santa pero que también puede degustarse en otoño. Consiste en unas masas finas de harina y aceite, que se fríen y se bañan en miel o azúcar. Son unos bocados crujientes y dulces, que se pueden aromatizar con anís o canela.
Si quieres probar la gastronomía de Córdoba, te recomendamos que visites El Caballo Rojo, un restaurante con una decoración elegante y acogedora, donde podrás disfrutar de una comida o una cena en un ambiente cálido y familiar. En El Caballo Rojo podrás saborear una cocina cordobesa exquisita, con platos clásicos y modernos, elaborados con productos frescos y Aceite de Oliva Virgen Extra.
Invierno: el tiempo del cocido y las migas
El invierno es una estación fría en Córdoba, pero también tiene su encanto. Es el momento de abrigarse bien, de pasear por las calles iluminadas por las luces navideñas o de visitar los belenes y los mercadillos. También es el momento de disfrutar del calor del hogar, del fuego y de la buena mesa.
El invierno también es la estación del cocido, un plato contundente que se elabora con garbanzos, carne de cerdo (morcilla, chorizo, tocino…), verduras (zanahoria, patata, repollo…)
Como ves, Córdoba es una ciudad que se puede visitar en cualquier época del año y que siempre te ofrecerá algo nuevo y diferente. Pero si hay algo que no cambia es la calidad y el sabor de su gastronomía, que te hará vivir una experiencia única e inolvidable. Por eso, te invitamos a que vengas a comer a El Caballo Rojo, un restaurante que te hará sentir como en casa y que te deleitará con los mejores platos de la cocina cordobesa. No lo dudes más y reserva tu mesa en El Caballo Rojo, el restaurante que te enamorará. ¡Te esperamos!